Vehículos para conductores con problemas visuales

Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 285 millones de personas padecen algún tipo de discapacidad visual en el mundo. Entre éstas, el 65% tiene 50 años o más y, teniendo en cuenta el ritmo de envejecimiento de la población, está previsto que el número de discapacitados visuales aumente en el corto plazo.Con el paso del tiempo, tanto la cualidad de distinguir los detalles pequeños como la de ver en la oscuridad se deterioran. Esto significa que muchos automovilistas tienen dificultades para leer el cuadro de mandos mientras conducen. Además, otras enfermedades visuales como el glaucoma, las cataratas o la degeneración macular relacionada con la edad tienen más probabilidades de desarrollarse en personas con más de 50 años.
Para dar respuesta a este problema cada vez mayor, la compañía automovilística norteamericana Ford ha unido sus fuerzas con un grupo de expertos de la Universidad de Cambridge, logrando desarrollar un Simulador de Discapacidad Visual para permitir a los diseñadores e ingenieros una mayor comprensión de los efectos de varios trastornos de la vista.Dicho simulador permite elegir entre una amplia gama de enfermedades visuales y ver una imagen a través de los ojos de una persona que la padece. Posteriormente se puede cambiar el diseño y los colores de los instrumentos del coche para comprobar cómo afectaría a la visión del conductor.
En 2030 se estima que casi el 25% de la población Europea tendrá más de 65 años, por lo que seguramente el porcentaje de gente con algún tipo de discapacidad visual se incrementará también. Desde 1994, Ford estudia las dificultades a las que se enfrentan los conductores mayores con el fin de garantizar que la lectura de los instrumentos del coche sea segura y cómoda para el mayor número posible de automovilistas.